Como verás, este año los adornos del roscón son poco convencionales, pero es que decorar un roscón no tiene límites ¡atrévete!
Si vas a organizar una merienda con chocolate a la española y quieres ofrecer más cosas además del roscón, que sean solamente dulces, lo salado está completamente fuera de lugar.
¿Por qué está fuera de lugar? porque en el chocolate se moja, puedes poner churros, ensaimadas, todo tipo de bollería.
Y, muy importante, no olvides el "bolao" como broche final.
Si vas a organizar una merienda con chocolate a la española y quieres ofrecer más cosas además del roscón, que sean solamente dulces, lo salado está completamente fuera de lugar.
¿Por qué está fuera de lugar? porque en el chocolate se moja, puedes poner churros, ensaimadas, todo tipo de bollería.
Y, muy importante, no olvides el "bolao" como broche final.
En el interior del roscón debes poner un haba, quien la encuentre será el rey de la reunión (he leído que esta tradición puede remontarse a la época romana).
¿Recuperamos esta deliciosa tradición?
Esta merienda tradicional es para tomar sentados, vestida la mesa con mantel y adornada con flores frescas si es posible, sí, sí, vamos a trabajar, pero con gusto.
El roscón y los dulces se colocan en el centro de la mesa, junto con la chocolatera, la jarra de agua helada y los azucarillos.
Lo ideal es servir el chocolate en jícaras, si no se dispone de ellas colocaremos una taza con su plato enfrente de cada comensal y otro plato con la servilleta doblada a su izquierda.
Recuerda, la taza o jícara se coloca enfrente de cada invitado porque en el chocolate se moja y es la mejor manera de evitar que gotee el chocolate sobre el mantel (con suerte).
Espero que disfrutes esta merienda junto con tus invitados y la repitas unas cuantas veces más.
Esta merienda tradicional es para tomar sentados, vestida la mesa con mantel y adornada con flores frescas si es posible, sí, sí, vamos a trabajar, pero con gusto.
El roscón y los dulces se colocan en el centro de la mesa, junto con la chocolatera, la jarra de agua helada y los azucarillos.
Lo ideal es servir el chocolate en jícaras, si no se dispone de ellas colocaremos una taza con su plato enfrente de cada comensal y otro plato con la servilleta doblada a su izquierda.
Recuerda, la taza o jícara se coloca enfrente de cada invitado porque en el chocolate se moja y es la mejor manera de evitar que gotee el chocolate sobre el mantel (con suerte).
Espero que disfrutes esta merienda junto con tus invitados y la repitas unas cuantas veces más.
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