En modo sano, receta exquisita de raya.

La raya es un pescado blanco, magro, que posee un bajísimo contenido graso, es muy rico en proteínas de alto valor biológico que incluye todos los aminoácidos esenciales, por lo que, desde el punto de vista nutricional, es sumamente interesante.

Podéis encontrar más información sobre las propiedades nutricionales de la raya aquí.

En casa nos encanta la raya, por su sabor, por su textura y porque tiene unos cartílagos muy fáciles de quitar, lo que la hace ideal cuando hay niños.

Esta receta es muy fácil y tiene algo que a mí cada vez me gusta más, y es que puedes ir recogiendo cacharrada a medida que vas terminando de cocinar.







Ingredientes: 1 Kg. de raya limpia y troceada, 4 cebollas, 1 diente de ajo, azafrán en hebras o en polvo, 1 cucharada de pan rallado, perejil picadito, AOVE, agua, sal marina, 1/2 vaso de vinagre.

Patatas fritas panaderas (opcional) 

En una cazuela, pon el agua, el vinagre y la sal a hervir, añade la raya, baja el fuego y deja cocer lentamente el pescado durante 20 minutos.

En un cazo o sartén con aceite, pocha las cebollas* y el diente de ajo junto con con el azafrán, baja el fuego si fuera necesario, (lo será)

Enciende el horno a 200º C. calor arriba y abajo.

Escurre la raya y colócala en una fuente de horno, añade la cebolla, espolvorea el pan rallado y el perejil picado, hornea, aproximadamente,  10 minutos.

Si te apetece acompañar la raya con patatas, adelante, incorpóralas al pescado 2 ó 3 minutos antes de apagar el horno.

En modo dieta, nada de patatas, una ensalada cruda con todo el verde que quieras será más que suficiente.

*Si no te apetece encontrar las cebollas, haz  puré con ellas cuando estén cocinadas.

Mi marido, por supuesto, acompañó este plato con patatas fritas panaderas y un montón de ensalada.

Decir que es un plato exquisito es quedarme corta ¡delicioso!

La receta es de Karlos Arguiñano, del que tengo que decir que jamás falla, sus recetas siempre, pero siempre, siempre, salen bien.